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Ante el sufrimiento y la humillación, hay que tomar partido; la neutralidad ayuda al opresor, nunca a la víctima, y el silencio alienta al torturador, nunca al torturado:
Elie Wiesel (1928-2016) Abogado estadounidense. Superviviente de campos de concentración nazis, y Premio Nobel de la Paz 1986.
La investigación del huachicol fiscal en la que está envuelta la Secretaría de Marina, está desatando demonios, tornándose en un escenario dantesco con tintes de mafia imposibles de ocultar. Al momento, son cuando menos cinco personas muertas, unas ejecutadas y otras supuestamente suicidadas, entre oficiales de alto rango de la dependencia, empresarios y funcionarios de la Fiscalía General de la República, los que han perdido la vida.
Primero, Sergio Carmona Ángulo, apodado “el rey del huachicol” y empresario de apariencia, fue ejecutado en noviembre de 2021, al comenzar a destaparse la cloaca de la importación ilegal de combustible desde Texas. Carmona financió varias campañas electorales de gobernadores de Morena. Mientras le cortaban el pelo en una estética de Monterrey, fue ejecutado. En Morena y la 4T comenzaba a salir de control el escándalo por su mecenas favorito. Su muerte tranquilizó a muchos encumbrados morenistas.
En octubre de 2024, en Colima, fueron ejecutados Magaly Janet Nava Ramos, oficial de la FGR, y el contraalmirante, Fernando Rubén Guerrero. Éste, había denunciado ante el mismísimo secretario de Marina del obradorato, Rafael a Ojeda, a oficiales involucrados en el huachicol fiscal. Los denunciados no eran cualquier marino, eran los sobrinos políticos de Ojeda. Guerrero no tardó mucho en perder la vida.
Ernesto Cuitláhuac Vázquez Reyna, delegado de la FGR en Tamaulipas, fue ejecutado el 4 de agosto de este año en Reynosa. Investigaba también el huachicol fiscal.
Este lunes se “suicidó” el capitán de Protección Portuaria en Altamira, el capitán Abraham Jeremías Pérez Ramírez. Él había recibido un presunto soborno de cien mil pesos por permitir la descarga de diésel ilegal en el puerto de Tampico.
Y apenas ayer murió el capitán de Marina Adrián Omar del Ángel Zúñiga, que había trabajado en la Aduana de Manzanillo, de donde fue removido en 2023. La Marina informó oficialmente que “perdió la vida durante un ejercicio de práctica de tiro real”.
La cuenta de muertes relacionadas con el huachicol fiscal va en cinco, pero desafortunadamente apunta a que seguirá creciendo, porque lo que está en juego con la investigación de Omar García Harfuch, no solo es el prestigio de la Marina, ya muy maltratado, sino cientos de millones de pesos.
De terror lo que está pasando en la dependencia a la que López Obrador mandó a su perdición al darle el manejo de aduanas, puertos y aeropuertos. Ahí están las consecuencias…y lo que falta.
X@jaimelopezmtz
Escrito por Jaime López Martínez
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