Celebra Iglesia Católica solemnidad de María Inmaculada Y Nuestra Señora de la Salud, en medio de un ambiente de vida tan contaminado

“Cuánta necesidad tenemos de salud en nuestro ambiente tan contaminado, tan lleno de enfermedad,  tan agresivo”, lamentó el Arzobispo

En el aniversario de la Virgen de la Salud, patrona de esta Arquidiócesis de Morelia, que ocurre en medio del Adviento que es el periodo en que en la Iglesia Católica los fieles se preparan para recibir el nacimiento del Niño Jesús, durante la Misa de la Solemnidad de María Inmaculada de la Salud, el Arzobispo Carlos Garfias Merlos resaltó a la Madre de Dios que fue concebida sin pecado y por ello la escogida de Dios para participar en el Plan divino.

El jefe pastoral expuso ante los fieles reunidos este día en la Basílica de Pátzcuaro donde tuvo su sede la Arquidiócesis antiguamente, que es importante venir al encuentro con nuestra Madre en su casa y a su encuentro: “encontrándonos con María experimentamos consuelo y esperanza, y a través de ella encontramos a Cristo nuestro Salvador.

En esta celebración de la Inmaculada Concepción  llamó a los fieles a vivir intensamente este encuentro con María, a través de quien nos podemos encontrar con Jesús.

La salud del cuerpo, de la mente y de las emociones, dijo, es importante mantenerlas pero más aún la salud espiritual: “cuánta necesidad tenemos de salud en nuestro ambiente tan contaminado, tan lleno de enfermedad,  tan agresivo, violento, tan descalificador y crítico, tan discriminatorio”, lamentó el jefe pastoral. Hizo énfasis en la atención a la manifestación de toda enfermedad en que Nuestra Señora de la Salud “está con nosotros para aliviarnos del rencor, la tristeza que nos hacen mucho daño y nos destruyen”, pronunció, como el miedo que incapacita y esclaviza y cuánto nos aniquila. La salud en todos estos rubros es necesaria pero más aún la salud espiritual para estar unidos en Cristo y en Él encontrar la paz, la respuesta, la unidad, la armonía, la mediación, “en Cristo nuestra paz encontrar la salud espiritual por la relación que tenemos con Él”.

“Acerquémonos a nuestra Madre, Nuestra Señora de la Salud”, instó el líder de esta grei católica, tras revelar que hace 100 años fue proclamada patrona de nuestra Arquidiócesis, y esta Basílica de Pátzcuaro declarada basílica menor unida a las grandes basílicas de la Iglesia Católica en el mundo.

Monseñor Garfias Merlos dijo también que estamos viviendo el año jubilar, año lleno de gracia y de bendición “que nos ofrece el perdón de nuestros pecados, indulgencia plenaria y recuperación de nuestra salud espiritual y que nos invita a renovarnos espiritualmente”, y hacer nuestro propio itinerario de vida espiritual tanto personal como comunitario y aprovechar la inmensa gracia que se nos ofrece.

Debemos ser capaces de perdonar y reconciliar, pues se debe tomar la reconciliación y la paz en el camino y asumirla como un instrumento fundamental para renovarnos interiormente,  hizo votos, así como porque recuperemos todos nuestra salud en todos estos rubros “siendo capaces de convertirnos en artesanos de la paz teniendo a Jesús en nuestro corazón, para con nuestros hermanos ofreciendo ternura, amor y paz”.