Convocan a apoyo para alimentar 2 mil 500 perros en Navidad y Año Nuevo

Asociación animalista rebasa su capacidad, piden adopciones para continuar rescatando vidas

La asociación Generando Hogares de Amor para Animales Desprotegidos (GHAPAD) arrancó oficialmente la onceava edición del programa “Pancitas Llenas 2025-2026”, un esfuerzo que busca llevar alimento y alivio a más de 2 mil 500 lomitos y michitos que pasarán las fiestas decembrinas en las calles de Morelia.

Lejos del ambiente cálido que suele rodear la Navidad, los animales sin hogar viven estas fechas como una temporada de supervivencia, frío intenso, hambre constante y el estruendo de la pirotecnia que convierte cada noche en un espacio de terror.

Para revertir un poco esa realidad, GHAPAD recorrerá 60 colonias los días 24 y 31 de diciembre.

La presidenta de la asociación, Esmeralda Cerda Pizano, enfatizó que esta campaña no solo llena pancitas, sino que también ofrece un respiro emocional para quienes viven en abandono.

«Queremos que por una noche puedan tener sus pancitas llenas y no vaguen en busca de comida como si no la merecieran, este esfuerzo no solo les brinda alimento, sino un respiro de la hostilidad que enfrentan día a día», señaló.

La convocatoria invita a la ciudadanía a donar insumos esenciales como arroz quebrado, croquetas, sobres de comida para perros y gatos, vitaminas Kidy Pharmaton, pasiflora, hojas de maíz, contenedores y vaporeras (estás serán devueltas al terminar la jornada).

También se reciben donativos económicos y se solicita apoyo de ruteros voluntarios para entregar las cenas navideñas.

Es muy importante que carne y verduras se donen tres días antes de su preparación, el 21 y 22 de diciembre.

En este llamado solidario también participa Carlos Maya Cordero, integrante de la Asociación de Abogados Animalistas de México (ASAAM) y Activismo por el Mundo Animal (AMA), quien recordó que el sufrimiento de los animales se intensifica por los estruendos decembrinos.

«En estas fechas no solo padecen frío y hambre, sino que también sufren los estragos de la pirotecnia, cuyo ruido amplificado les genera un estrés inconmensurable. Queremos minimizar, aunque sea por una noche, su sufrimiento físico y espiritual», señaló.

La línea para aportar o solicitar información es el 4431746674.

Porque ninguna criatura debería afrontar sola el invierno, GHAPAD pide a los morelianos convertirse en el rayo de esperanza que estos 2 mil 500 peludos necesitan para sobrevivir la época más dura del año.

Asociación animalista rebasa su capacidad, piden adopciones para continuar rescatando vidas

El refugio de la asociación Generando Hogares de Amor para Animales Desprotegidos (GHAPAD) atraviesa una de sus etapas más críticas, el lugar está a tope.

Así lo lamentó su presidenta, Esmeralda Cerda Pizano, quien lanzó un llamado conmovedor para que la ciudadanía considere adoptar —especialmente a los lomitos de talla grande— y así permitir que la labor de rescate continúe.

El problema no es solo el espacio, es también la percepción equivocada.

Cerda Pizano señaló que la mayoría de las personas sigue prefiriendo perros de talla chica y recién nacidos, por comodidad o por la idea de que se adaptarán más rápido al entorno familiar.

Sin embargo, explicó que más del 60 por ciento de los lomitos grandes son animales dóciles, nobles y con requerimientos mínimos de espacio.

“Desgraciadamente, a la hora que se piensa adoptar buscan perros de talla chica y quisiéramos invitarlos a que se den la oportunidad de conocer a los de talla grande, que son extremadamente dóciles y tranquilos, su carácter y temperamento permite adaptarse incluso a pequeños departamentos y con un pequeño paseo por día se cubren todas sus necesidades”, manifestó.

La presidenta detalló que, al igual que las personas, los animales tienen carácter propio.

Algunos perros grandes son increíblemente serenos, mientras que muchos perros pequeños pueden exigir actividad constante como parte de su bienestar emocional.

GHAPAD alberga más de 40 perros esperando un hogar, todos sobrevivientes del maltrato y la indiferencia.

En esa diversidad hay opciones para cualquier estilo de vida, desde canes hiperactivos para personas deportistas, hasta lomitos pasivos que se adaptan perfectamente a hogares donde reina la tranquilidad.

Pidió a la sociedad abandonar el mito de que la talla determina el espacio requerido.

Incluso perros jóvenes y grandes suelen preferir la calma, la compañía y una simple camita donde sentirse seguros.

También recomendó consultar al rescatista sobre la personalidad del animal, pues la compatibilidad emocional es la clave de una adopción exitosa.

“El tamaño de un perro no determina su actividad física. Tenemos en GHAPAD perros de tamaño muy grande que son extremadamente tranquilos, disfrutan una camita, la comodidad, la pasividad y la tranquilidad, no requieren jornadas extenuantes de tiempo, mientras que algunos de talla pequeña pueden ser extremadamente hiperactivos, demandando tiempo de calidad, espacios de tiempo y paseos cotidianos”, explicó.

Hoy, la asociación enfrenta un doloroso “tapón”, el sobrecupo les impide continuar con los rescates, dejando en suspenso la posibilidad de salvar nuevas vidas que dependen de su apoyo.

Con un dejo de esperanza, la presidenta pidió recordar que la talla no define ni el amor ni el temperamento.

«Los lomitos grandes también merecen una oportunidad, una caricia y un lugar donde dormir sin miedo», concluyó.